Hace apenas unos días hablamos de la ópera prima de Julian Schnabel y del homenaje que hizo a su amigo el pinto Jean-Michael Basquiat. En aquella obra también se veía la relación íntima de Schnabel con el mundo de las artes plásticas. Su mundo, antes de dar el salto a las cinematográficas. Y en 1996, con Basquiat, el director norteamericano ya daba una pincelada sobre Vincent Van Gogh en las primeras secuencias protagonizadas por Jeffrey Wright.
Además, Willem Dafoe también tenía una aparición en esta ópera prima. Demasiada coincidencia hasta este 2019, donde Schnabel y Dafoe han vuelto a unir sus caminos con Van Gogh, a las puertas de la eternidad. Un filme que se centra en la etapa del pintor holandés en la ciudad francesa de Arles. Fuente de inspiración de muchos de sus cuadros. Pero también causa de muchos de esos problemas de personalidad, psicológicos e incluso psiquiátricos que acecharon al artista impresionistas.
Además, Willem Dafoe también tenía una aparición en esta ópera prima. Demasiada coincidencia hasta este 2019, donde Schnabel y Dafoe han vuelto a unir sus caminos con Van Gogh, a las puertas de la eternidad. Un filme que se centra en la etapa del pintor holandés en la ciudad francesa de Arles. Fuente de inspiración de muchos de sus cuadros. Pero también causa de muchos de esos problemas de personalidad, psicológicos e incluso psiquiátricos que acecharon al artista impresionistas.