Un ejercicio de entretenimiento minimalista, pese a rimbombantes efectos especiales. A eso nos invitan los guionistas de la franquicia A quiet place, con 65, un drama de ciencia ficción, viajes en el tiempo y escasas pero potentes escenas de acción, protagonizadas por el siempre solvente Adam Driver.
La Tierra, inhabitable, ha obligado a los humanos a buscar otro planeta de similares características. Allí, junto a su familia, vive el piloto Mills (Adam Driver), que acepta un trabajo para trasladar a otros humanos criogenizados a su destino. Lo hace por dinero, para poder costear el tratamiento de su hija enferma. El viaje sale mal y tras un accidente, Mills acaba con su nave siniestrada en un planeta, que resulta ser la Tierra, hace 65 millones de años.
Allí pueblan los dinosaurios, donde el piloto es el último de la cadena alimenticia. Junto a él solo ha sobrevivido la joven Koa (Ariana Greenblatt) y juntos deberán abrirse paso entre animales prehistóricos y un meteorito que amenaza con el fin del mundo.
El planteamiento, sobre el papel, es más que atractivo. Su ejecución no tanto, pero hay aspectos más que destacables para hacer de 65 una película digna de reproducción. Empezando por las imágenes y el rol de Adam Driver, recordando a aquellas películas, muchas de serie B, donde el protagonista debe pasar las de Caín para poder sobrevivir a un ambiente hostil.
Con su compañera de reparto, Ariana Greenblatt, hay la complicidad suficiente para creerte que este equipo conseguirá su objetivo. No obstante, personalmente, echo de menos más chicha en el apartado de la acción. Sobre todo en forma de más disparos, más carreras, qué el peligro no se resuelva por ciencia infusa o el instinto voraz de los dinosaurios, que aparecen a cuentagotas. Sí hay escenas así, pero tardan en desarrollarse y, para mi, son pocas. Una película de estas características pide más barro y menos metafísica.
Cierto que hay un apartado sentimental, en forma de reminiscencias familiares, que plantean los conflictos personales de un protagonista roto por la pérdida. Afortunadamente no están metidas con calzador estas escenas, pero son un poco lentas en su desarrollo.
Por lo que el entretenimiento queda garantizado, aunque solo sea por el poder de la imagen (Salvatore Totino sabe lo que hace) y unos dinosaurios bien diseñados, inspirados, obviamente, en la magia de Steven Spielberg, pero más acorde a las teorías contemporáneas, que dibujan a estos animales prehistóricos con menor tamaño y una simbiosis entre ave y reptil.
Para 'enfrentarse' a 65, cuya duración es perfecta, mejor dejar a un lado cualquier tipo de prejuicio o similitud con estos trabajos. Una obra, por cierto, que ejecuta bastante bien la llegada del meteorito que lo cambió todo. En definitiva, resultona.
Ficha Técnica
Título original: 65
Año: 2023
Duración: 93 min.
Género: Acción / Ciencia ficción / Viajes en el tiempo
País: Estados Unidos 
Dirección: Scott Beck, Bryan Woods
Guion: Scott Beck, Bryan Woods
Música: Chris Bacon, Danny Elfman
Fotografía: Salvatore Totino
Reparto: Adam Driver, Ariana Greenblatt, Chloe Coleman, Nika Williams
Puntuación: 6/10
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