¿Hasta dónde estás dispuesta a llegar por salvar a tu familia de la ruina? ¿Tiene precio la dignidad? ¿El dinero puede con todo? ¿Qué estás dispuesto a hacer por 'X' cantidad de dinero? Pues todas estas preguntas, y alguna más que os surgirán, tienen respuesta en la delirante comedia negra Juegos sucios, debut de E.L. Katz con un buen guión de Trent Haaga y David Chirchirillo.
En poco más de hora y veinte minutos, la película se centra en un día en la vida de Craig (Pat Healy). Como cualquier ciudadano medio, se despierta junto a su mujer y su bebé, desayuna y se va al trabajo. Allí le comunican que es despedido y el mundo se viene abajo. Quién pagará ahora las facturas con un aviso de desahucio en ciernes.
Mientras piensa en una solución, Craig ahoga sus penas en el alcohol antes de volver a casa y dar la trágica noticia. En el pub se topa con su viejo amigo Vince (Ethan Embry), momento en el que las copas empiezan a hacer su efecto, a la vez que recuerdan viejas batallas de juventud.
Por un azar del destino, en el mismo 'antro' están Violet (Sara Paxton) y Colin (David Koechner), un matrimonio que esta celebrando el cumpleaños de ella y se fija en esta pareja de perdedores. El fracaso de Craig y Vince se huele a la legua, y Violet y Colin, forrados de pasta, les proponen un inquietante juego: si aceptan una serie de pruebas ganarán cierta cantidad de pasta. Pero entonces, lo que comienza siendo una forma fácil y rápida de ganar dinero se torna en un frenesí de apuestas a cada cual más disparatada y peligrosa.
Estrenada en 2013, Juegos sucios juega la baza de la crisis económica, presentando a un protagonista ahogado por las deudas, recién despedido y con una ingente cantidad de dinero a cambio de su dignidad. Es fácil llegar a empatizar con un personaje que emprende, eso sí, un camino hacia la barbarie, donde los guionistas nos muestran hasta qué punto es capaz de llegar el ser humano, movido por la codicia y la necesidad.
Así pasamos de la comedia, con varios gags realmente divertidos, a momentos de auténtico drama e incluso coqueteando con el thriller de terror, pues los protagonistas son espoleados hasta el extremo de jugarse la vida por un puñado de dólares.
Cheap Thrills (título original) es una apuesta minimalista y original por enseñar la dualidad a la que nos someto el ego en muchas ocasiones. El filme se mueve en espacios muy reducidos, donde parece reinar la concordia y el compadreo, y gracias a ello te mantiene en alerta, porque ves que los personajes tienen muchas cosas que esconder. Una tensión que poco a poco va saliendo hasta el estallido final.
Con ello, E.L. Katz logra una puesta de largo bastante interesante, con la que te va moviendo por distintos géneros y hace que te involucre si no en toda, sí en parte de la historia. Además de como decía, formular una serie de preguntas que en conclusión podría resumirse como: ¿sería yo capaz de hacer algo así? Buen trabajo.
Ficha Técnica
Título original: Cheap Thrills
Año: 2013
Duración: 83 min.
Género: Comedia negra / Thriller
País: Estados Unidos 
Dirección: E.L. Katz
Guion: Trent Haaga, David Chirchirillo
Música: Mads Heldtberg
Fotografía: Andrew Wheeler, Sebastian Winterø
Reparto: Pat Healy, Ethan Embry, Sara Paxton, David Koechner, Amanda Fuller, Brighton Sharbino
Puntuación: 7/10
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