'Un amigo extraordinario': Tom Hanks te invita a ser mejor persona

Ver en pantalla a Tom Hanks siempre es un placer. Hasta en sus trabajos más flojos, como La Terminal, el oscarizado actor es de esos pocos elegidos que todo lo que toca lo convierte en oro. Capaz de dejarte helado con una mirada asesina (Camino a la perdición); conquistar el universo (Apolo XIII); ser un héroe (Sully) narrar la segunda mitad del siglo XX como nadie (Forrest Gump); escapar de piratas (Capitán Phillips); sobrevivir en una isla remonta (Naufrago), poner en jaque a un Gobierno (Los archivos del Pentágono) o hacerte reír a carcajada limpia (Despedida de soltero), Hanks domina cualquier género. Como se dice castizamente: vale para un roto o un descosido, y tiene un talento descomunal. 

Yo soy de esos que, además, ha crecido viéndole por toda esa trayectoria cinematográfica.  Ir a ver una película de Tom Hanks era y es toda una experiencia, que te hacía y hace esperar expectante, con cierto nerviosismo, que se apaguen las luces y comience la función. La emoción, sea cual sea eso sí, está asegurada. Eso siempre. Y de nuevo está sobresaliente en su último trabajo hasta la fecha: Un amigo extraordinario.

Otra vez da toda una lección de humanidad y te invita a ser mejor persona, cara a cara, interpretando a Fred Rogers, el famoso presentador norteamericano de televisión que fue líder de audiencia durante tres décadas, desde 1962, con el programa infantil: Mister Rogers' Neighborhood. Un espacio televisivo donde Rogers, ministro presbiteriano, educador y comunicador, se dirige a los niños sin ninguna condescendencia. Con claridad, abordando temas de la vida cotidiana con toda la humanidad posible, combinando el lado didáctico con el entretenimiento.

Pero sobre todo Rogers muestra a los más pequeños cómo gestionar las emociones; cómo transformar la rabia que a veces trata de apoderarse de uno, en amor; la tristeza en alegría; o la frustración en éxito. Y no solo a niños, también a mayores, como le sucede al también periodista de Esquire, Lloyd Vogel, a quien interpreta en pantalla un soberbio Matthew Rhys. Personaje, eso sí, ficticio.

Curiosamente, en la película dirigida por Marielle Heller, Rhys es el auténtico protagonista. El periodista pasa por sus horas más bajas, en su recién estrenada paternidad. Pese a que su mujer e hijo son un pilar fundamental (qué bien está Susan Kelechi Watson), no puede escapar del conflicto aún sin resolver con su padre, a quien da vida el siempre solvente Chris Cooper.

Dominado por la rabia, Vogel tiene el encargo de entrevistar a Rogers. Como un faro en mitad de la tormenta, el presentador ilumina por completo la existencia del periodista, que queda descabalado de sus prejuicios. Lo que a priori empieza como una entrevista obligada se va transformando en un examen de conciencia. Como reza el título de esta crítica, Tom Hanks, en la piel de Rogers, le enseñará (y también al espectador) a ser una mejor persona.

Fuerzas equilibradas

Equilibrio tal vez sea la palabra que define a Un amigo extraordinario. Entre la santidad de Hanks y el diablo de Rhys, hay toda una gama de grises y géneros que transitan el musical, la comedia o el melodrama, con total armonía. Los guionistas Micah Fitzerman-Blue, Noah Harpster y la cámara de Heller dan con la tecla y el tempo perfecto para que la narración del filme no encalle. Todo lo contrario. Un amigo extraordinario navega por más de una hora y media de travesía que te hace estar en paz contigo mismo, gracias también a ese escenario entre la realidad y la ficción.

Los conflictos que tienen los personajes se van solventando con total naturalidad. Como un espejo de la vida misma. Y el gran triunfo, dentro de ese equilibrio, es hacer que la película se convierta en una especie de trabajo terapéutico, donde Tom Hanks es el doctor y nosotros sus pacientes, que anhelamos ser mejores personas.

¿Puede una película funcionar de esta manera? Pues sí. El cine tiene ese don de remover emociones, que parecen escondidas. De dar con un clic que te hace salir de la butaca como reconfortado, nuevo. Aquí, además, Tom Hanks te habla de tú a tú, mirándote directamente. Te invita a conocerte. 

Una película que se matamorfosea en una suerte de guía para ser un buen ciudadano desde el perdón, la comprensión y la aceptación. Suena rimbombante y a bonitas palabras. Pero en serio, existen y están ahí. Hanks solo te ayuda a descubrirlas. Y quién en su sano juicio se resiste a los consejos del laureado actor.

Tom Hanks, el perfecto vecino

Sin ánimo de extenderme más, Un amigo extraordinario es de las mejores noticias que nos deja este amargo 2020. Sí, habrá quien piense que es una suerte de Ned Flanders de carne y hueso, pero en cuanto conectas con su sabiduría y con los problemas del periodista, la película te hace volar solo.

Para quienes ejercemos esta profesión es muy fácil ponernos el traje de Vogel, atascado en una carrera que no sabes si va para adelante o para atrás. Tu jefe te encarga una entrevista que, en condiciones normales, no harías ni a tiros, pero la vida y sus designios tienen esa capacidad de sorprenderte una vez más, haciendo que topes con personajes como Rogers, que te cambian para siempre y para bien.

Aprovechando, además, esa bondad que siempre irradia Hanks, el perfecto vecino, es más sencillo apropiarte de toda la argumentación de la obra, y como digo y vuelvo a repetir, gozar de la experiencia de ir al cine a sucumbir a los encantos de una historia maravillosa.

Ficha Técnica 

Título original: A Beautiful Day in the Neighborhood

Año: 2019

Duración: 108 min.

Género: Comedia / Drama / Biográfico / Periodismo

País: Estados Unidos 

Dirección: Marielle Heller

Guion: Micah Fitzerman-Blue, Noah Harpster (Artículo: Tom Junod)

Música: Nate Heller

Fotografía: Jody Lee Lipes

Reparto: Tom Hanks, Matthew Rhys, Chris Cooper, Susan Kelechi Watson, Noah Harpster, Tammy Blanchard, Wendy Makkena, Enrico Colantoni, Sakina Jaffrey, Maddie Corman, Crystal Lonneberg, Maryann Plunkett, Michael Masini

Premios: 2019: Premios Oscar: Nominada a mejor actor secundario (Tom Hanks)

                2019: Globos de Oro: Nominada a mejor actor secundario (Tom Hanks)

                2019: Premios BAFTA: Nominada a mejor actor secundario (Tom Hanks)

                2019: Critics Choice Awards: Nominada a mejor guion ad. y actor sec. (Hanks)

                2019: Sindicato de Actores (SAG): Nominada a mejor actor secundario (Hanks)

                2019: Sindicato de Guionistas (WGA): Nominada a mejor guion adaptado

                2019: Satellite Awards: Nominada a mejor actor secundario (Tom Hanks)

Puntuación: 9/10