Cuando uno oye el nombre de Homer Simpson, lo primero que le viene a la cabeza es la imagen del padre de la familia más conocida en el mundo de la televisión: Los Simpson. Pues bien, en 1975 John Schlesinger -Cowboy de medianoche- colocaba por primera vez frente al foco a un personaje con tan célebre nombre aunque muy alejado de la personalidad del famoso vecino de Springfield.
Como plaga de langosta cuenta los entresijos del Hollywood de los años 30. Tod -William Atherton, Cazafantasmas- es un joven pintor recién salido de la universidad que comienza a trabajar para un gran estudio cinematográfico. Allí conoce a Faye -Karen Black, El Gran Gatsby- una joven actriz con un único sueño, triunfar en la meca del cine.
Basándose en la obra de Nathanael West, Schlesinger nos ofrece una radiografía del fracaso en el Hollywood de los años 30 a través de una rica galería de personajes. La figura principal es la de Faye. La joven actriz despierta numerosas atenciones masculinas, flirtea con unos y con otros aun sabiendo que ella solamente dejará que la ame un magnate de la industria y que solo amaría al hombre más guapo del mundo. Un rol superficial y manipulador que trae de cabeza a todo aquel que se le acerca.
Como contrapunto nos encontramos a Homer Simpson -Donald Sutherland, Gente Corriente- un solitario contable que se enamora perdidamente de la joven, llegando a mantener una relación de la que solo recoge sufrimiento y humillaciones. Un personaje que bordea el patetismo interpretado perfectamente por el canadiense.
Y como vértice en este triángulo aparece Tod, quizá el único que se codea con las altas esferas de Hollywood, pero a la vez desencantado con lo que observa alrededor. Junto a ellos destacan Burgess Meredith -Rocky- padre de Faye, un vendedor borrachin aficionado a engañar a todo el que se cruza en su camino; Bo Hopkins -American Graffiti- y Pepe Serna -El precio del poder-, dos amigos que intentan conquistar a la protagonista.
Poderosa visualmente, a pesar de tener una duración de dos horas y media, no puedes apartar los ojos de la pantalla. Las miserias y andanzas de estos personajes mezcladas con el glamour del mundo en el que intentaban sobrevivir te atrapan y te conducen hasta uno de los finales más poderosos, terroríficos y turbadores que se han visto en la gran pantalla.
Un cierre sobresaliente para una obra no muy conocida que merece una reivindicación. Quizá ese final incómodo y estremecedor, que te deja en estado de shock, sumado al tono tremendamente crítico del filme hacía la industria de Hollywood no ayudase a la película convirtiéndola en un filme maldito en su momento. Por eso merece la pena rescatarla del olvido, disfrutarla y reflexionar sobre ella una vez la hayamos visto. Pocas veces se han hecho películas así y probablemente nunca se volverán a hacer.
Título original: The Day of the Locust
Año: 1975
Duración. 144 min.
Género: Drama / Cine dentro del cine / Años 30 / Sátira
País: Estados Unidos
Dirección: John Schlesinger
Guión: Waldo Salt (Novela: Nathanael West)
Música: John Barry
Fotografía: Conrad L. Hall
Reparto: Karen Black, William Atherton, Donald Sutherland, Burgess Meredith, Bo Hopkins, Geraldine Page, Pepe Serna, Richard Dysart, Lelia Goldoni, Jackie Earle Haley, Billy Barty
Premios: 1975: Premios Oscars: Nominada a mejor actor de reparto (Burgess Meredith) y fotografía
1975: Globos de oro: Nominada mejor actriz drama (Karen Black) y actor secundario
1975: Premios BAFTA: Ganadora Mejor diseño de vestuario. Tres nominaciones
1975: Festival de Cannes: Sección Oficial (Fuera de concurso)
Puntuación: 8/10
Como plaga de langosta cuenta los entresijos del Hollywood de los años 30. Tod -William Atherton, Cazafantasmas- es un joven pintor recién salido de la universidad que comienza a trabajar para un gran estudio cinematográfico. Allí conoce a Faye -Karen Black, El Gran Gatsby- una joven actriz con un único sueño, triunfar en la meca del cine.
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| Karen Black junto a Burgess Meredith. |
Basándose en la obra de Nathanael West, Schlesinger nos ofrece una radiografía del fracaso en el Hollywood de los años 30 a través de una rica galería de personajes. La figura principal es la de Faye. La joven actriz despierta numerosas atenciones masculinas, flirtea con unos y con otros aun sabiendo que ella solamente dejará que la ame un magnate de la industria y que solo amaría al hombre más guapo del mundo. Un rol superficial y manipulador que trae de cabeza a todo aquel que se le acerca.
Como contrapunto nos encontramos a Homer Simpson -Donald Sutherland, Gente Corriente- un solitario contable que se enamora perdidamente de la joven, llegando a mantener una relación de la que solo recoge sufrimiento y humillaciones. Un personaje que bordea el patetismo interpretado perfectamente por el canadiense.
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| Karen Black y William Atherton se conocen en la industria de Hollywood en los años 30 |
Y como vértice en este triángulo aparece Tod, quizá el único que se codea con las altas esferas de Hollywood, pero a la vez desencantado con lo que observa alrededor. Junto a ellos destacan Burgess Meredith -Rocky- padre de Faye, un vendedor borrachin aficionado a engañar a todo el que se cruza en su camino; Bo Hopkins -American Graffiti- y Pepe Serna -El precio del poder-, dos amigos que intentan conquistar a la protagonista.
Retrato de 'perdedores'
Un retrato de los perdedores, eso es el filme. Actores y actrices que acuden a Hollywood con una maleta repleta de sueños e intenciones y que ven la cruda realidad de la industria del cine. Artistas que esperan una llamada para trabajar en papeles muy secundarios con tal de granjearse un currículo o que se tienen que jugar el pellejo en rodajes arriesgados como meros extras. En definitiva, la cara B del sueño hollywoodiense. |
| Bo Hopkins, Karen Black y William Atherton en un momento de la película. |
Poderosa visualmente, a pesar de tener una duración de dos horas y media, no puedes apartar los ojos de la pantalla. Las miserias y andanzas de estos personajes mezcladas con el glamour del mundo en el que intentaban sobrevivir te atrapan y te conducen hasta uno de los finales más poderosos, terroríficos y turbadores que se han visto en la gran pantalla.
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| 'Como plaga de langosta' es una mirada crítica al Hollywood de la época. |
Un cierre sobresaliente para una obra no muy conocida que merece una reivindicación. Quizá ese final incómodo y estremecedor, que te deja en estado de shock, sumado al tono tremendamente crítico del filme hacía la industria de Hollywood no ayudase a la película convirtiéndola en un filme maldito en su momento. Por eso merece la pena rescatarla del olvido, disfrutarla y reflexionar sobre ella una vez la hayamos visto. Pocas veces se han hecho películas así y probablemente nunca se volverán a hacer.
Ficha Técnica
Título original: The Day of the Locust
Año: 1975
Duración. 144 min.
Género: Drama / Cine dentro del cine / Años 30 / Sátira
País: Estados Unidos
Dirección: John Schlesinger
Guión: Waldo Salt (Novela: Nathanael West)
Música: John Barry
Fotografía: Conrad L. Hall
Reparto: Karen Black, William Atherton, Donald Sutherland, Burgess Meredith, Bo Hopkins, Geraldine Page, Pepe Serna, Richard Dysart, Lelia Goldoni, Jackie Earle Haley, Billy Barty
Premios: 1975: Premios Oscars: Nominada a mejor actor de reparto (Burgess Meredith) y fotografía
1975: Globos de oro: Nominada mejor actriz drama (Karen Black) y actor secundario
1975: Premios BAFTA: Ganadora Mejor diseño de vestuario. Tres nominaciones
1975: Festival de Cannes: Sección Oficial (Fuera de concurso)
Puntuación: 8/10
Vaya puto final más bárbaro. De los mejores (y siniestros) que he visto. Y además enseñando la miseria de Hollywood. Ese productor diciendo a William Atherton que hacen películas basura (no textualmente) para contentar al público mientras nadan en millones es hoy más real que nunca
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