Renovarse o morir. Y The Deuce apuesta claramente por la primera opción en su segunda temporada. Tras una primera arrolladora, la continuación de la serie para HBO de David Simon, Richard Price, George Pelecanos (el trío The Wire, palabras mayores) tenía el listón muy alto. Tras finiquitar sus ocho capítulos, puedo decir que éste lo ha subido un peldaño más.
Y es que la serie, que arranca algo dubitativa -y con ese temazo de Elvis Costello que es un presagio y una declaración de intenciones-, pierde todos los estereotipos y prejuicios y se lanza desbocada hacia el éxito. Gracias, sobre todo, a la evolución de unos personajes magníficamente dibujados y plasmados por un reparto coral perfecto. Empezando por James Franco, en sus dos versiones de Vincent y Frankie Martino. Fabuloso, como siempre.
Pero es que hay algunos protagonistas que dan un paso más, como Maggie Gyllenhaal y su Candy/Eileen; Gbenga Akinnagbe y ese Larry que empieza a encontrarse a sí mismo o Emily Meade y su alter ego Lori, en lucha constante con su chulo: C.C -Gary Carr-.
La serie sigue girando en torno a las drogas, la prostitución, la noche, la policía y la mafia neoyorquina, los clubes nocturnos, la libertad sexual y el porno. La esencia sigue siendo la misma pero evolucionada. Los creadores avanzan en torno a cuatro años una vez puesta la semilla del nacimiento de la pornografía. El cine de dos rombos -con 'guiñazo' a como el género triunfó de todas todas- empieza a sacar la cabeza de la clandestinidad de los bajos fondos. Se quita sus anclas y despega dando suculentos beneficios para quien verdaderamente maneja los hilos.
Paralelamente al sexo, los chulos viven su propia catarsis toda vez que la prostitución a pie de calle forma parte del pasado -principal leitmotiv de la primera temporada-. En esta era del video, de los estrenos cinematográficos, de las estrellas pornográficas o de las cabinas, la prostitución ya no tiene cabida. Máxime cuando las mujeres -con Margarita Levieva y Jamie Neumann a la cabeza- comienzan a revelarse y a reclamar sus derechos también en la calle.
En cambio la Mafia sigue a los suyo. Los Gambino y Los Genovese no atienden a otra cosa que al dinero. Mientras los dólares sigan llenando la caja, que el mundo se vaya al garete si quiere. Y aquí vuelven a estar sobresalientes Michael Rispoli y Daniel Sauli como Ruddy Pipilo y Tommy Longo respectivamente. Más cuando comparten planos con James Franco, Big Mike y Black Frankie. Estos dos últimos son de esos personajes secundarios que hace a los principales más buenos si caben.
Porque si algo caracteriza a la segunda temporada es esa lucha entre lo nuevo y lo viejo, que acaba engullendo a todos los personajes. El que se queda atrás, el que no sabe ver hacia dónde van los nuevos tiempos, la palma. Ya sea literalmente o perdiendo los pocos privilegios que podrían tener en la primera temporada.
También destaca la capacidad para, dentro de toda esta selva que es el Deuce, arrancar puntos cómicos que de vez en cuando salen en esta continuación. Hay uno de Ralph Macchio especialmente brillante, amén de los de Chris Bauer y un sorprendente Michael Gandolfini. Y mira que es difícil, pues realmente lo que entrelaza a todas las historias de Las crónicas de Times Square es el drama que viven cada uno de los personajes para escoger su camino.
Y es que de eso también va la magnífica serie de HBO. De elegir. De escoger una vida y asumirla hasta las últimas consecuencias. En esta segunda temporada de The Deuce, los protagonistas tienen que lanzarse definitivamente a lo desconocido. Pelear, caer y levantarse sino quieren ser devorados por ese barrio y esa ciudad que lo arrasa todo.
Ya hay confirmada una tercera temporada para seguir atentos a las historias de canallas, mafiosos, chulos, polícías, políticos, estrellas del porno y supervivientes que quieren hacerse un hueco en los bajos fondos de Nueva York. Esos que han dado tanto a la cultura popular y que todo apunta a que van a expandirse hacia el oeste...
Título original: The Deuce
Año: 2018
Duración II Temporada: 8 episodios. 56 minutos aproximadamente
Género: Series / Drama / Prostitución / Drogas / Mafia / Años 70
País: Estados Unidos
Dirección: David Simon (Creator), Ernest R. Dickenson, James Franco, Alex Hall, Michelle MacLaren, Roxann Dawson, Uta Briesewitz
Guión: David Simon, Richard Price, George Pelecanos
Fotografía: Vanja Cernjul, Pepe Ávila del Pino
Reparto: James Franco, Maggie Gyllenhaal, Michael Rispoli, Chris Bauer, Lawrence Gilliard Jr, Dave Krumholtz, Margarita Levieva, Dominique Fishback, Kim Director, Michael Gandolfini, Daniel Sauli, Luke Kirby, Gary Carr, Gbenga Akinnagbe, Emily Meade, Method Man, Don Harvey, Sepideh Moafi, Mustafa Shakir, Jamie Neumann, Ralph Macchio, Anwan Glover, Andrea-Rachel Parker, Thaddeus Street, Olivia Luccardi, Chris Coy, Zoe Kazan, Armand Assante
Puntuación: 9,5/10
Y es que la serie, que arranca algo dubitativa -y con ese temazo de Elvis Costello que es un presagio y una declaración de intenciones-, pierde todos los estereotipos y prejuicios y se lanza desbocada hacia el éxito. Gracias, sobre todo, a la evolución de unos personajes magníficamente dibujados y plasmados por un reparto coral perfecto. Empezando por James Franco, en sus dos versiones de Vincent y Frankie Martino. Fabuloso, como siempre.
Pero es que hay algunos protagonistas que dan un paso más, como Maggie Gyllenhaal y su Candy/Eileen; Gbenga Akinnagbe y ese Larry que empieza a encontrarse a sí mismo o Emily Meade y su alter ego Lori, en lucha constante con su chulo: C.C -Gary Carr-.
La Mafia de los Genovese y Los Gambino no atiende a otra cosa que al dinero. |
La serie sigue girando en torno a las drogas, la prostitución, la noche, la policía y la mafia neoyorquina, los clubes nocturnos, la libertad sexual y el porno. La esencia sigue siendo la misma pero evolucionada. Los creadores avanzan en torno a cuatro años una vez puesta la semilla del nacimiento de la pornografía. El cine de dos rombos -con 'guiñazo' a como el género triunfó de todas todas- empieza a sacar la cabeza de la clandestinidad de los bajos fondos. Se quita sus anclas y despega dando suculentos beneficios para quien verdaderamente maneja los hilos.
Paralelamente al sexo, los chulos viven su propia catarsis toda vez que la prostitución a pie de calle forma parte del pasado -principal leitmotiv de la primera temporada-. En esta era del video, de los estrenos cinematográficos, de las estrellas pornográficas o de las cabinas, la prostitución ya no tiene cabida. Máxime cuando las mujeres -con Margarita Levieva y Jamie Neumann a la cabeza- comienzan a revelarse y a reclamar sus derechos también en la calle.
La industria del porno pasa de la clandestinidad a los focos de la luz pública. |
En cambio la Mafia sigue a los suyo. Los Gambino y Los Genovese no atienden a otra cosa que al dinero. Mientras los dólares sigan llenando la caja, que el mundo se vaya al garete si quiere. Y aquí vuelven a estar sobresalientes Michael Rispoli y Daniel Sauli como Ruddy Pipilo y Tommy Longo respectivamente. Más cuando comparten planos con James Franco, Big Mike y Black Frankie. Estos dos últimos son de esos personajes secundarios que hace a los principales más buenos si caben.
Historias entrelazadas, elegir un camino y la expansión de un negocio
Como ya hicieran en The Wire, los creadores de The Deuce. Las crónicas de Times Square vuelven a recrear la expansión urbanística de un barrio, una ciudad y sus diferentes estratos sociales con una maestría a la altura de muy pocos. De hecho, ese es uno de los principales valores de esta serie. También en su segunda temporada. Repartir minutos y subtramas es un acierto cojonudo, si se permite la expresión. Y también relacionar unas con otras a través del sexo, el dinero y la violencia, todo intrínseco a la especie humana.Algunas de las secuencias de The Deuce (Temporada II). |
Porque si algo caracteriza a la segunda temporada es esa lucha entre lo nuevo y lo viejo, que acaba engullendo a todos los personajes. El que se queda atrás, el que no sabe ver hacia dónde van los nuevos tiempos, la palma. Ya sea literalmente o perdiendo los pocos privilegios que podrían tener en la primera temporada.
También destaca la capacidad para, dentro de toda esta selva que es el Deuce, arrancar puntos cómicos que de vez en cuando salen en esta continuación. Hay uno de Ralph Macchio especialmente brillante, amén de los de Chris Bauer y un sorprendente Michael Gandolfini. Y mira que es difícil, pues realmente lo que entrelaza a todas las historias de Las crónicas de Times Square es el drama que viven cada uno de los personajes para escoger su camino.
Don Harvey y Lawrence Gilliar Jr. |
Y es que de eso también va la magnífica serie de HBO. De elegir. De escoger una vida y asumirla hasta las últimas consecuencias. En esta segunda temporada de The Deuce, los protagonistas tienen que lanzarse definitivamente a lo desconocido. Pelear, caer y levantarse sino quieren ser devorados por ese barrio y esa ciudad que lo arrasa todo.
Ya hay confirmada una tercera temporada para seguir atentos a las historias de canallas, mafiosos, chulos, polícías, políticos, estrellas del porno y supervivientes que quieren hacerse un hueco en los bajos fondos de Nueva York. Esos que han dado tanto a la cultura popular y que todo apunta a que van a expandirse hacia el oeste...
Ficha Técnica
Título original: The Deuce
Año: 2018
Duración II Temporada: 8 episodios. 56 minutos aproximadamente
Género: Series / Drama / Prostitución / Drogas / Mafia / Años 70
País: Estados Unidos
Dirección: David Simon (Creator), Ernest R. Dickenson, James Franco, Alex Hall, Michelle MacLaren, Roxann Dawson, Uta Briesewitz
Guión: David Simon, Richard Price, George Pelecanos
Fotografía: Vanja Cernjul, Pepe Ávila del Pino
Reparto: James Franco, Maggie Gyllenhaal, Michael Rispoli, Chris Bauer, Lawrence Gilliard Jr, Dave Krumholtz, Margarita Levieva, Dominique Fishback, Kim Director, Michael Gandolfini, Daniel Sauli, Luke Kirby, Gary Carr, Gbenga Akinnagbe, Emily Meade, Method Man, Don Harvey, Sepideh Moafi, Mustafa Shakir, Jamie Neumann, Ralph Macchio, Anwan Glover, Andrea-Rachel Parker, Thaddeus Street, Olivia Luccardi, Chris Coy, Zoe Kazan, Armand Assante
Puntuación: 9,5/10
Pues me alegra saber que está mejor esta segunda, lo cierto es que me había olvidado de ella...sabía que ya estaba la segunda, pero la vorágine de series es tan grande que como la primera gustándome no me impactó, la había olvidado...veré esta segunda antes de que termine el año.
ResponderEliminarUn saludo
Está es un pelin mejor por esa evolución de los personajes. Y como siempre, la magnífica radiografía de una gran ciudad como Nueva York
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