Como decía el poeta clásico Virgilio: "El amor lo conquista todo". Incluso cuando se da de bruces contra una enfermedad tan terrible como el Alzheimer, esa que te priva de lo que has sido y eres; de tu memoria y...en definitiva, de ti mismo. Porque los seres humanos estamos hechos de recuerdos. De momentos y experiencias vividas. Toda una gama de sentimientos y emociones que el Alzheimer trata de borrar de un plumazo.
Sin embargo hay algo que siempre estará ahí. El verdadero amor. Ese, imposible de olvidar. Hasta con esta terrorífica patología de por medio. Todos tenemos -o tendremos, porque aún no ha llegado, pero llegará- una historia especial con una persona. Un amor inolvidable que ha marcado nuestra existencia. Un amor siempre recordado. Y sobre eso va el segundo largometraje de Matín Rosete: Remember Me.
Sin embargo hay algo que siempre estará ahí. El verdadero amor. Ese, imposible de olvidar. Hasta con esta terrorífica patología de por medio. Todos tenemos -o tendremos, porque aún no ha llegado, pero llegará- una historia especial con una persona. Un amor inolvidable que ha marcado nuestra existencia. Un amor siempre recordado. Y sobre eso va el segundo largometraje de Matín Rosete: Remember Me.