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lunes, 20 de noviembre de 2017

'La librería': La pasión por los libros de Isabel Coixet

Si uno busca la definición de maniqueísmo se encuentra con las siguientes: 1- Postura fundada por el filósofo persa Manes, que se basa en la existencia de dos principios absolutos, eternos y contrarios: el bien y el mal. 2- Cualquier actitud que mantiene posturas extremas sin puntos intermedios.
Bien, pues esto es lo que puede sentir el espectador al terminar de ver La librería, última película hasta la fecha de Isabel Coixet -Cosas que nunca te dije, Mi vida sin mí-.


Adaptando la novela homónima de Penelope Fitzgerald, la directora española nos cuenta la historia de Florence Green -Emily Mortimer, Match Point-, una mujer que perdió a su marido en la II Guerra Mundial y que decide abrir una librería en una localidad costera de Inglaterra. Una tarea difícil que contará con la oposición vecinal encabezada por la poderosa Violet Gamart -Patricia Clarkson, Si la cosa funciona-, una terrateniente de la zona que tiene otros planes para el local en el que Florence inicia su negocio.

Dos bandos es lo que nos encontramos en La Librería. De un lado, el personaje interpretado por Mortimer Acompañada de Christine -Honor Kneafsey- una niña que le ayuda en la tienda, y del señor Brundish -Bill Nighy, Siempre locos-, un ermitaño apasionado por la lectura, conforman la cara amable del filme. Patricia Clarkson y el resto del pueblo, cargados de envidias y chismorreos dañinos dan vida a los malos, por otro lado.

Bill Nighy y Patricia Clarkson en 'La librería'.

Y a pesar de un planteamiento tan maniqueo en cuanto a los personajes, el último trabajo de Coixet es muy serio y completo. Desde el primer momento el espectador acaba atrapado en esos bucólicos paisajes que adornan este homenaje a los libros y cuyo encanto conjunto hace olvidar los defectos del filme.

La actuación del siempre notable Bill Nighy y de la joven Honor Kneafsey también suman positivamente. No así Emily Mortimer. La británica, que da el pego como mujer frágil pero decidida y con carácter, gesticula en exceso haciendo poco creíble su papel.

Una película recomendable, que no siendo el mejor trabajo de Isabel Coixet, sí recupera sensaciones perdidas respecto a sus últimos trabajos. Asimismo, hay muchos que ven en el filme una metáfora de lo que ha vivido la directora recientemente. Nacida en Barcelona en 1960, la autora se ha mostrado fuertemente contraria a la independencia de Cataluña, siendo muy criticada por los separatistas catalanes. Sin embargo Coixet se ha mantenido firme, defendiendo su postura internacionalmente y siendo una de las abanderadas dentro del mundo de la cultura en este aspecto. Valiente, como la protagonista de su última obra.



Ficha Técnica


Título original: The Bookshop

Año: 2017

Duración: 110 min.

Género: Drama / Literatura

País: España España

Dirección: Isabel Coixet

Guión: Isabel Coixet (Novela: Penelope Fitzgerald)

Música: Alfonso de Villalonga

Fotografía: Jean-Claude Larreu

Reparto: Emily Mortimer, Bill Nighy, Patricia Clarkson, Honor Kneafsey, James Lance, Michael Fitzgerald, Harvey Bennett, Jorge Suquet, Frances Barber, Hunter Tremayne

Puntuación: 6/10

3 comentarios:

  1. He oído hablar mucho de esta directora, pero todavía no me he lanzado a ver ninguna de sus películas. Tenía pensado ir a ver esta al cine, pero viendo lo que dices quizás deba buscar alguna que la represente mejor. ¿Cuál me recomendarías?

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    1. Yo vería antes "Mi vida sin mi" quizá la película más redonda de Coixet. Un drama que emociona y con una interpretación muy buena de Sarah Polley.

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  2. EL SUEÑO DE LOS TESOROS

    De niño siempre soñaba
    haber hallado un tesoro:
    pingües monedas de oro
    que en contarlas dilataba.

    Y al despertar la amargura
    acibaraba mi boca,
    frustración de un alma loca
    con ansias de la aventura.

    Con las monedas del sueño
    pensaba que era posible
    desde volverme invisible
    a ser de un imperio dueño.

    Yo por entonces leía
    libros de héroes a cientos
    que poblaban Cenicientos
    y en su biblioteca había.

    Hernán Cortes y Pizarro
    y Colón y los Pinzones
    y los bravos marañones
    del Eldorado bizarro.

    Y me veía en Lepanto,
    codo a codo con Cervantes,
    entre españoles gigantes
    venciendo en un mar de espanto.

    Y con el Gran Capitán
    en las campañas de Flandes,
    y con Almagro en los Andes
    y alférez en Aquisgrán.

    Y con Cortés en Otumba,
    y grumete de Orellana,
    y en la nave capitana
    del Austria cuando retumba.

    Cuando el señor de dos mundos
    donde el sol no se ponía,
    al orbe lo dirigía
    desde Escoriales profundos.

    Pero los sueños son sueños:
    y el despertar los deshace,
    al nuevo día que nace
    con su lucha y sus empeños.

    Después mi suerte dispuso
    trabajar entre las gemas
    que adornan cuantas diademas
    mi disposición compuso.

    Y por mis manos pasaron
    los brillantes a millares,
    y esmeraldas estelares
    que en silencio se alejaron.

    Los rubíes y zafiros
    destellando fugitivos
    entre mis dedos furtivos
    emprendieron nuevos giros.

    Y el vacío hecho en mis manos
    por ausencia del tesoro
    es aquel oro del moro
    que buscan los hortelanos.

    Y ahora pueblan mis sueños
    mis versos volando etéreos,
    y son frágiles y aéreos
    tesoros de mis ensueños.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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