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lunes, 27 de noviembre de 2017

'En realidad, nunca estuviste aquí': Joaquin Phoenix, azote de la perversión

Cuando en el año 2012 Paul Thomas Anderson rodaba su película The Master sabía que estaba juntando a los dos mejores actores de ese momento: Philip Seymour Hoffman y Joaquin Phoenix. Cinco años después, por desgracia el primero ya no está entre nosotros. Pero Phoenix sigue siendo el actor más versátil y camaleónico que hay, capaz de aumentar el nivel de los filmes en los que aparece.

En su nuevo trabajo hasta la fecha, En realidad, nunca estuviste aquí, el actor de origen puertorriqueño interpreta a Joe, un veterano de guerra que se gana la vida salvando a chicas jóvenes de la prostitución y los abusos sexuales. Un día, Joe recibe la llamada de un político pidiéndole ayuda ya que cree que su hija ha sido secuestrada. Los bajos fondos y las altas esferas conocerán la brutalidad de Joe...


Un personaje perturbado, traumatizado por una niñez de abusos y una madurez marcada por las experiencias en la guerra. Repleto de demonios interiores que la directora Lynne Ramsay escenifica a través de flashbacks que se repiten durante toda la película. Perturbadoras imágenes que sirven para entender el comportamiento solitario y taciturno del protagonista.

Un papel central que ya hemos visto en anteriores ocasiones. El de un hombre afectado, marcado por su pasado y que intenta ayudar a los más desprotegidos. Con un Joaquin Phoenix muy caracterizado -con mucho más peso del habitual, barba canosa y pelo largo recogido en una pequeña coleta, con cicatrices por su cuerpo que rebelan los sufrimientos del pasado- que sabe imprimir la desesperación y tristeza de su personaje, tanto por su pasado como por la tarea que tiene que ejercer ahora en el presente. Y al mismo tiempo una brutalidad hacia los depravados sexuales que abusan de chicas jóvenes.

Una simbiosis que se ve acentuada por la vida privada del personaje. Viviendo con su madre, a la que cuida y de la que el espectador adivina también sufrió abusos por parte del padre de Joe. En las pocas escenas que hay domésticas, madre e hijo parecen llevarse bien, compartiendo complicidades y siendo estos momentos los únicos tranquilos dentro del filme.

El resto, con un tono oscuro y desalentador propios del tema que trata, están dominados por una tensión malsana que te mantienen en vilo. Escenas repletas de violencia y crudeza que convierten a En realidad, nunca estuviste aquí en un thriller perturbador e incluso terrorífico por instantes, cargado del dramatismo y sensibilidad que el protagonista sabe imprimir con la mirada y su gestualidad.

Un Joaquin Phoenix en estado de gracia que se alzó con el premio a la mejor interpretación en el Festival de Cannes y cuyo nombre ya suena en las quinielas para la temporada de premios que se avecina -Oscar, Globos de Oro, Bafta- y que supondría un reconocimiento no solo a este trabajo, sino a una carrera que en los últimos años ha enlazado trabajos sobresalientes -Her, Puro Vicio, Irrational Man-.

Joaquin Phoenix es Joe y los criminales están a punto de conocerle.

Ficha Técnica


Título original: You Were Never Really Here

Año: 2017

Duración: 95 min.

Género: Thriller / Drama

País: Reino Unido Reino Unido

Dirección: Lynne Ramsay

Guión: Lynne Ramsay (Novela: Jonathan Ames)

Música: Jonny Greenwood

Fotografía: Thomas Townend

Reparto: Joaquin Phoenix, Alessandro Nivola, John Doman, Judith Anna Roberts, Alex Manette,  Ekaterina Samsonov, Kate Easton,  Jason Babinsky, Frank Pando, Ryan Martin Brown, Scott Price,  Dante Pereira-Olson, Jonathan Wilde, Leigh Dunham, Vinicius Damasceno

Premios: 2017: Festival de Cannes: Mejor actor (Phoenix) y Mejor guión

Nota: 7,5/10

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