'Espías desde el cielo': Salvar una vida o miles, he ahí la cuestión

Las guerras siempre han sido una fuente inagotable de inspiración para el cine. Porque da igual cuántas versiones hayamos visto de la II Guerra Mundial, del Holocausto, de la Guerra Civil española, etc. Estaremos en el año 3000 y seguirán estrenándose nuevas versiones de lo mismo. La pregunta que surge a continuación es: ¿por qué siguen teniendo "éxito"? Porque depende de como te las cuenten, esto es, el punto de vista, el significado, el trasfondo, la acción, la intriga. Mil cosas que la hagan especial.

En cierta medida, Espías desde el cielo (Gavin Hood, 2015) muestra como son ahora las guerras, con drones pilotados a miles de kilómetros de distancia, gabinetes de crisis de los gobiernos,... Siempre con el dilema y/o mensaje de que en los conflictos, las decisiones se toman en base a elegir entre qué daños colaterales quieres tener: salvar una vida o cientos de ellas con un sólo acto de guerra. 

Aun con todo, no aporta nada realmente significativo, nada realmente nuevo. En algunos momentos parece como si estuvieras viendo un capítulo extendido de Homeland. Así, en esta ocasión en vez de ver a Carrie (Claire Danes) seguimos paso a paso la misión conjunta del Reino Unido con Estados Unidos para capturar a un grupo importante de terroristas en Nairobi (Kenia). Entre los implicados tenemos a la coronel Katherine Powell (Hellen Mirren) que es la que dirige la misión; al gabinete inglés encabezado por el Général Frank Benson (Alan Rickman), y a miles de kilómetros, en la base militar estadounidense a las afueras de Las Vegas, está Steve Watts (Aaron Paul), que se encarga de ser los "ojos" de la misión, dirigiendo el dron.  

Burocracia y un guión mordaz
Uno de los mejores momentos de la película, con risas incluidas del público, es el lío burocrático que se crea a raíz de la toma de decisiones. Parece un obra de teatro de enredo donde cada personaje le va pasando la patata caliente al otro. 

Así, con la acidez de momentos, como el anterior, y un guión lleno de frases muy buenas como: "La verdad es la primera víctima de la guerra" y "Nunca le digas a un soldado que no conoce el precio de una guerra" permiten abrir un gran debate sobre la guerras, sus pros y contras. 

El comité de crisis donde se "toman" las decisiones

Aun con todo, falla en lo que suelen errar este tipo de filmes: la moraleja final. Ese intento por "obligar" al espectador a sentir esa culpa por vivir como vivimos es un poco repetitiva. No digo que no se deba hacer, pero con el propio filme ya bastaba con crear ese debate interno. 

¿Salvar una vida o salvar al mundo de otro atentado?

3 razones para verla

Aunque no llegue a ser considerada un pilar sobre la base del cual se construyan las canones de los filmes de guerra, tiene tres argumentos de peso para ir a verla:

Primero: La tensión. El director Gavin Hood, antiguo militar, que ya tiene experiencia con Expediente Anwar o la ganadora del Oscar por mejor película de habla no inglesa e 2005, Tsotsi, aporta una tensión que se mantiene durante la hora y 42 minutos que dura la película. Realmente llega a exasperarte la burocracia que hay en medio de este tipo de misiones y piensas cuántas vidas se han perdido por la indecisión (cobardía) de los políticos. 

Sin entrar en valoraciones subjetivas del tema, el nervio que desprende la película es palpable y, como sigues minutos a minuto lo que ocurre, llegas a revolverte en el asiento, tenso y con las pulsaciones a cien.

Aron Paul es Steve Watts, el piloto que dirige los drones 

Segundo: Drones. Fuera de todo conocimiento que ya tenemos la mayoría sobre este tipo de artefactos que tienen tanto beneficios como perjuicios, es increíble ver como se ha ido desarrollando la tecnología (aunque sea con fines militares).  

Espías desde el cielo nos muestra como es la nueva guerra del siglo XXI, donde los drones son las nuevas armas de las potencias mundiales. Fuera de éste detalle, no aporta mucho más a lo que ya sabemos de los filmes de guerra, que desde el fatídico 11-S, han proliferado como setas. 

Una Game Boy o un mando a distancia de un atípico dron

Tercero: el trío de actores Helen Mirren, Alan Rickman y Aaron Paul. Los tres sostienen la película, aunque también los secundarios merecen reconocimiento, como Barkhad Abdi (Capitán Phillips), Iain Glen (Juego de Tronos, Kick Ass 2) y Phoebe Fox (La mujer de negro: El ángel de la muerte, Black Mirror).

Iain Glen es James Willett el ministro británico de asuntos exteriores (con problemas gástricos) 

Como es de esperar, Helen Mirren y Alan Rickman tienen unas tablas que no tienen ninguno de los anteriores y su propio carisma hace que te creas la historia.

Oda a Alan Rickman

Quizás un cuarto argumento para ir a ver Espías desde el cielo (Eye in the Air) es que se trate de la última película del gran actor Alan Rickman. El pasado 14 de enero el mundo se paró para los fans del actor cuando salió la noticia de su fallecimiento. Había llevado su enfermedad de una forma tan discreta que nadie pensaba que, por ejemplo, esta película sería su último trabajo. 

Alan Rickamn (Hammersmith, 1946 - Londres, 2016)

En una entrevista a Helen Mirren dijo sobre el actor en esta película que "el Alan que ves en la película es el Alan que era en la realidad. Él era brillante, sagaz, elegante, perspicaz, con una naturaleza y una humanidad formidable. Y al verlo en este papel podemos verlo a él" (La Vanguardia.com.mx, 23 Abril 2016).

Durante 69 años, desde 1978 con su primera película Romeo y Julieta, ha ido conquistando y ganando (casi) todos los premios. Era conocido por su interpretación del profesor Severus Snape en la saga del mago Harry Potter, pero muchos le conocimos siendo el malo malísimo de Robin Hood, príncipe de los ladrones, como el Sheriff de Nottingham o el villano de Jungla de Cristal  (Hans Gruber), incluso el juez Turpin en Sweeney Tood, el barbero diabólico de la calle Fleet. 

Fue un (INCREIBLE) Hans Gruber, el super villano en Jungla de Cristal

Tenía esa cara de villano que a tantos actores les ha encasillado. Sin embargo, a Alan Rickman no, pues todos también hemos podido ver su cara más desenfadada en Love Actually o más romántica en Sentido y Sensibilidad. 

Actor querido, aquí interpretando a Snape, en un momento de descanso del rodaje con el director y los actores protagonistas

Por último, si queremos ser exactos, Espías desde el cielo no es realmente la última de Alan Rickman ya que podremos oírle en Alicía a través del Espejo en la voz de la oruga Absolem. Pero, sea como sea, siempre estará con nosotros y le recordaremos.

Podremos, por última vez, oírle con la oruga Absolem, en Alicía a través del espejo 

Ficha Técnica

Título original: Eye in the Sky 

Año: 2015

Duración: 102 min.

Género: Bélico / Thriller

País:  Reino Unido

Director: Gavin Hood

Guión: Guy Hibbert

Música: Paul Hepker, Mark Kilian

Reparto: Helen Mirren, Alan Rickman, Aaron Paul, Barkhad Abdi, Iain Glen, Phoebe Fox,Carl Beukes, Richard McCabe, Tyrone Keogh, Babou Ceesay, James Alexander,Lex King, Daniel Fox, John Heffernan, Luke Tyler, Jeremy Northam.

Puntuación: 7/10