'Un toque de violencia': Retrato de la decadencia humana

Cuatro historias separadas e inspiradas en hechos reales, cuatro personajes desconocidos y una nota común: la violencia como resolución de conflictos en una sociedad corrompida de arriba a abajo, como la imparable China comunista. Así se resume Un toque de violencia, la película premiada en Cannes 2013 a mejor guión del director y guionista chino Jia Zhang Ke.

El primer relato de todos, el más atractivo visual y literariamente por el contenido social y personal que subyace entre escena y escena, tiene como protagonista a Dahai -Jiang Wu-, un minero harto de la corrupción del jefe del pueblo y su acaudalado socio que, ante la pasividad de sus vecinos y las burlas de los acólitos al poder, se toma la justicia por su mano en un arranque de violencia plasmado con suma crudeza.

Jiang Wu protagoniza la historia más interesante de la cinta (Golem).

A partir de esta primera media hora, absolutamente apabullante, la cinta empieza a aflojar con la segunda historia, cuyo protagonista adopta como modo de vida el robo y asesinato. Una continuación a la trama de Dahai más superflua y con poco gancho que da paso a la tercera intriga, cuyo argumento gira en torno a la joven Xiaoyu, enamorada de un hombre casado y recepcionista en un prostíbulo, acorralada por el mundo hostil que la rodea y que sucumbe a la ira para salir adelante de los problemas que la acechan. Sin duda la parte de la cinta con mayor carga dramática de todas y que hace remontar el trabajo de Zhang Ke, hasta dar paso a la cuarta y última historia, la más endeble de toda la película y donde la violencia que se plasma es más bien psicológica que física.

Actores profesionales y amateurs dan vida a este puzzle mediante el cual, el cineasta chino realiza un exhaustivo análisis de las desigualdades sociales y económicas en el gigante asiático. Convertida dentro de pocos años en la primera potencia mundial, el régimen comunista chino -implacable en su contaminada burocracia- ejerce en la práctica, sin despeinarse, un capitalismo salvaje que se ve reflejado en sus ciudadanos, despojados de toda condición humana y sumergidos en una vorágine de violencia, ira y frustración.

La sangre empapa la pantalla en 'Un toque de violencia (Golem).

La falta de libertad provocada por la cruel dictadura y la mafia de sus gobernantes, desde el primero al último esbirro, contribuyen a convertir en bestias salvajes a personas y ciudadanos 'normales'. Hechos que retrata con acierto el realizador asiático a través de este rompecabezas social, con personajes que residen en lugares radicalmente opuestos dentro de un mismo país; con idiomas y cualidades distintos; claro sinónimo de que, cantonés o mandarín, nadie puede escapar del despiadado sistema comunista que reduce a la nada a sus ciudadanos.

Esa degradación humana es a la que asistimos en esta película, que avanza con paso lento -a veces demasiado-, pero firme. La dificultad que entraña rodar historias paralelas, con la violencia en todas su vertientes como único hilo común entre ellas, provoca que esta obra venida del lejano oriente no consiga, a pesar de su innegable impacto, enganchar hasta el final, ya que en algunos puntos cojea entre tanto drama y sangre.

Pese a su excesiva duración y altibajos de montaña rusa, Un toque de violencia invita a reflexionar y a advertir del peligro que, a través de la tiranía de una mafia política, supone despojar a los seres humanos de toda condición y dignidad. Más ahora que intentan convencernos con cantos de sirena de ideas y programas teóricamente inspiradores y libres, pero que esconden las cadenas de la dictadura.

Ficha Técnica

Título original: Tian zhu ding

Año: 2013

Género: Drama

Duración: 130 min.

País: China 

Director: Jia Zhang Ke

Guión: Jia Zhang Ke (Novela: Su Tong)

Música: Giong Lim

Fotografía: Yu Likwai

Reparto: Jiang Wu, Meng Li, Lanshan Luo, Baoqiang Wang, Jiayi Zhang, Tao Zhao

Premios: 2013: Festival de Cannes: Mejor guión
               2013: Independent Spirit Awards: Nominada a Mejor película extranjera

Puntuación: 6/10