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viernes, 24 de enero de 2014

'Profesor Lazhar': Clases magistrales acerca de la vida

La figura del profesor ha sido llevada al cine en numerosas ocasiones y casi siempre con las mismas premisas: docente nuevo que llega a una clase con determinados problemas y logra ser un referente para los alumnos. Con este punto de partida, que una película sobre la enseñanza te sorprenda es algo muy difícil. Profesor Lazhar (Philippe Falardeu, 2011), lo consigue y con creces. Durante una hora y media el espectador asiste a una lección de cine de las que se recuerdan durante días después de su visionado.

Mohamed Fellag y Sophie Nélisse son los motores de la película.
El filme, nominado al Oscar como mejor película de habla no inglesa y ganadora de premios en los festivales de Valladolid, Toronto y Locarno entre otros, nos presenta a un hombre de 55 años de origen argelino que es contratado en un colegio de Montreal para sustituir a una profesora fallecida en trágicas circunstancias. Allí se tiene que hacer cargo de los alumnos y luchar contra la alteración que ha supuesto para ellos la pérdida de su maestra. Los métodos expeditivos del nuevo docente y, sobre todo, su personalidad, supondrán un impacto en las vidas de sus pupilos.

El cuarto trabajo del director canadiense -guionista además- es una clase magistral de la vida y de cómo afrontar complicadas  situaciones. En este caso, la muerte. Queda claro tras ver la película, que la opción más fácil en estos casos es el silencio, pero también la más nociva y la que peores consecuencias puede traer.

Así mismo, la cinta hace hincapié en el sistema educativo actual, criticando la pérdida de poder que han sufrido los profesores y mostrándonos a determinados alumnos como la extensión o reflejo de sus padres. El momento de la reunión del docente con los progenitores de una alumna, en la que estos le dicen a Lazhar “que se dedique a enseñar, no a educar a su hija”, muestra lo ilógico de la situación actual de la enseñanza.

Señor Lazhar

Una crítica latente en todo momento pero eclipsada por una figura principal deslumbrante y cautivadora. Ese no es otro que Bachir Lazhar, interpretado por Mohamed Fellag. Desde el primer momento en el que aparece, toda la atención se centra en él. Este personaje desprende por los cuatro costados tal humanismo y sencillez que hacen de su interpretación una de las mejores y más completas del año 2012.

Lazhar junto a sus alumnos.
No le hace falta recurrir a métodos ortodoxos de enseñanza -como podía ser en el caso de El club de los poetas muertos”- para ganarse al alumnado y a gran parte de sus compañeros de profesión. El actor argelino está perfectamente acompañado de un conjunto de actores adolescentes en el que destaca Sophie Nelisse (La ladrona de libros) interpretando a una estudiante que, a pesar de tener 11 años, demuestra una madurez impresionante, conectando desde el primer instante con Lazhar.

Profesor y alumna, maestro y aprendiz. Ellos son los principales ingredientes –junto a una banda sonora perfecta- de una película con muchas lecturas y todas ellas positivas. La principal, que ante trances dolorosos  no hay que guardarse el dolor y evitar hablar del asunto. Siguiendo ese camino se consigue enquistar la situación y crear un trauma que difícilmente se podrá tratar y superar. Por contra queda la otra alternativa, una opción que el cineasta canadiense enseña con sencillez y absoluta normalidad. Dos factores que vienen bien  en los tiempos que corren.


Ficha Técnica



Título original: Monsieur Lazhar

Año: 2011

Género: Drama / Enseñanza

Duración: 94 min.

País: Canadá 

Director: Philippe Falardeau

Guión: Philippe Falardeau

Música: Martin Léon

Fotografía: Ronald Plante

Reparto: Mohamed Fellag, Sophie Nélisse, Émilien Néron, Marie-Ève Beauregard, Vincent Millard, Seddik Benslimane, Louis-David Leblanc, Danielle Proulx, Brigitte Poupart, Jules Philip, Louis Champagne, Daniel Gadouas, Francine Ruel, Sophie Sanscartier

Premios: 2011: Nominada al Oscar a Mejor Película de habla no inglesa
                2011: Festival de Toronto: Premio a Mejor Película
                2011: Festival de Valladolid- Seminci: Premio Mejor Guión

Puntuación: 9/10

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